Anoche fumando un cigarrillo tendida en el sofá pensaba en que las situaciones difíciles nos ayudan a descubrir quienes realmente nos quieren, lo cual es maravilloso, sin embargo la mayor lección que se puede sacar es descubrir quienes no nos quieren o al menos no lo suficiente para estar a nuestro lado.
Tras varios meses plagados de días grises, me he cansado de los falsos cariños, los falsos amigos, incluso de la falsa familia, todas aquellas bonitas palabras que se dijeron al calor del "carrete" o de los momentos felices, quedaron en eso, palabras (y sabemos lo que el viento les hace).
Gracias Cinthyta, Víctor y familia, Claudia, Carolina y tío Leo, Leylita, Denisse, amigas del HEGC y por supuesto a mi familia por no soltar mi mano en los momentos difíciles.
Sólo puedo concluir que definitivamente tenemos 5 dedos en cada mano, porque no necesitamos más para contar a los verdaderos amigos.
P.S.: Me faltó mencionar a Harry Potter en cuyas páginas me distraigo de la apremiante realidad, y a Ismael que con sus letras maravillosas le pone banda sonora a mi vida.
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